¿Se dicen llamar?…

¿Por qué los padres son tan blandos y tan pasotas con sus hijos? ¿Quién se lleva la peor parte, ellos o sus ex? ¡No! ¡Las malas madrastras, esas que se lo comen todo, comparten tiempo, espacio, paciencia, cariño, cuidados de higiene y cuidados alimentarios.

Aparte de todo eso, preparan su ropa, los despiertan… y ¡cómo no! cuando están tristes, deprimidos, enfermos, atareados… Ahí están las malas madrastras ¿Malas? ¡Haciendo todo eso por uno que se dice llamar “padre”?

¡Sí, señoras malas madrastras! ¿Si fueran buenas no creerían que se merecerían un compañero que las valorara y agradeciera todos esos cuidados y tiempos que ni su ex familia les ha brindado? ¿Qué pasa? ¿Quién tiene que cambiar esto?

¿Hace falta ser la madrastra de Disney para que por fin… Alguien te dé tu sitio y te valore? No seamos niñeras, solo esposas… y ¿se dicen llamar padres… cuando no llegan ni a esposo?

Por S.R.

¡¡¡ Chachas Sentimentales!!!

¿Será hoy la palabra que se da a tantas horas dedicadas a los hijos de otros? ¿Son las madrastras hoy las niñeras gratis del futuro y las ex mujeres madres de la Visa Oro? Hoy día pienso que visto lo visto, creo que es más rentable empeñar un hijo o negociarlo para obtener un logro cada mes que criarlo, aguantarlo o educarlo.

¡Cuántos hipócritas se esconden detrás de una culpa haciendo que sus hijos se sientan culpables! Pagando sus miserias de rencor con un inocente de comportamiento rebelde solo por llamar la atención, reclamando derechos que parecen invisibles ante sus propios padres.

¿Realmente esos niños que tambalean de casa en casa, que buscan consuelo en las madrastras, ¿cuáles sus madres les hacen sentir inferiores por regalar una rutina, cariño y amor que esas mujeres usan para consolar y crear un hogar donde esas criaturas se sientan arropados?

¡Qué llevará a un hijastro a llamar madre a una madrastra y madrastra a una madre! ¿Son realmente culpables las que por decir “Sí quiero” responsables de cargar con el pasado de un marido?

Por S.R.

Los mensajeros inocentes…

Después de vivir una situación ajena a mí, quiero solo deciros a todas las mamás divorciadas y a los papás que no uséis a los niños para hacer daño a vuestras ex parejas, es inhumano. Analizad las situaciones antes de quemar la mente de esos pequeños, sé que duele el rechazo y ver al que fue un marido ahora en brazos de otra mujer, o al revés, pero… ¿Qué culpa tienen esos niños?

A veces actuamos con maldad y nos olvidamos de que hacemos más daño mandando al mensajero inocente que seguir en nuestras vidas, esperando una recompensa justa. El odio, la rabia, la venganza… Solo traen dolor y amargura, no solo para quien los siembra sino también para aquellos que viven bajo ese cielo gris lleno de ira y reproche.

Inculcar mentiras a un niño es envenenar su mente y su desarrollo. Yo, S.R., os pido a todos coherencia con vuestros actos y actitudes. ¡Amemos a los niños y dejemos que sean puros! El que juega con fuego en el camino se quemará, nunca se sabe cuándo cambia el viento… Suerte por si algún día te salpica la llama de la venganza o de la infelicidad.

Por S.R.

¿Fantasmas o Ex?

No es una disputa y menos una guerra entre pasado y futuro. Lógicamente en causa están muchos factores: dolor, críticas, luchas, rencor… y lo que menos me gusta, una disputa entre ex y realismo.

Culpar al que entra no arregla el dolor del que rompe, nadie es culpable del pasado de nadie… las relaciones pasan al igual que las edades, una pasión no es un amor, una «segunda» no es menos que una «primera», no es más amado el hijo parido que el hijo «adoptado» (el que opina diferente poco ha amado).

Dar espacio, dejar a la gente ser feliz es crecer como persona, poner trabas o usar el egoísmo o el chantaje para retener o amargar a un ex, es poco amar a unos hijos o a uno mismo.

Amar es no retener a nadie obligado a tu lado. Ser feliz es aceptar otros colores en tu vida, es darse cuenta de que solo criticamos lo que no podemos ser y recordar que la vida ¡¡Es solo una!!

No hay que reflejar en otros los defectos que te han llevado hoy a ser una ex… ¿O un fantasma?

Por S.R.

¿Ex o Fantasmas?

¿Vivir o pelear? ¿Es más de lo mismo? Antes, en lo antiguo, llamábamos a las suegras “las complicadas”, pero ahora todo ha cambiado.

Asumes una relación con el ex de alguien, sea hombre o mujer, y parece que vas a un precipicio sin red de seguridad. Es algo como pagar una pena sin delito alguno. Cargas con todo el paquete, asumes una responsabilidad que no es tuya y encima eres lo peor… ¿Por decir basta?

En esos momentos, miras a tu pareja o marido como a un ser de otra galaxia y te preguntas: ¿Esto es real? ¿Me ha dicho esto? Cosas que escuchas de su boca que hacen más daño que pinchos en los oídos, como: ¿Quieres que me pelee? ¿Qué hago? ¡Paso! No quiero problemas…

Si esto realmente es así, no tengamos ex, el que está con uno o una que no cargue con su pasado, ni cargue al que venga. Pido cordura.

Nadie tiene que pagar las frustraciones de nadie y si uno o una no está preparado/a para renovar su mente, que siga con lo del pasado, pero que no pague un viaje prometiendo un futuro para luego dar vueltas en la misma cabina que solo repite su billete.

Hay que vivir… Sí, pero ¿en el pasado cargando las maletas de otros y que te den lo prometido en el futuro?

¿Quién paga este vivido presente… tú o tu ex? No regales tiempo… ¡dale valor al minuto!

Por S.R.