¡Aprender a Ser!

Hoy es difícil ser bonito, ser rico, ser feliz, ser fiel y en todo esto ¡ser calvo y bobo! Creo que hay dos formas de vida, una es agradecer la lealtad de una gran mujer a tu lado y otra ser un puto mendigo sexual. ¿Cuál es esa razón? ¿Esa locura que todos preguntan y nadie tiene respuestas? Podemos realmente amar con la verdad al día de hoy donde todo parece un mundo de carreras a ver quien folla más, sin saber a quien has follado antes ¿Te vale el pene?

¿Qué seguridad hay hoy en día de formar una familia y mantenerla con armonía? Mujeres lo tenéis todo perfecto, gracias pero igualmente. Dale, date, respeta, sincérate, habla, cumple, este es el momento de escuchar, pregunta, sigue, insiste, perdona, sin rencores… Muchos dicen estar solos, yo reflexiono: ¿Qué buscas? ¿Qué queréis de ella? La mami, la madrastra, la fiera en la cama, que escuche tu silencio ¿la que oculte tu pregunta? ¿Sólo buscamos descargas emocionales o sexuales? Seamos más claros, estoy solo ¿solo por qué?

Estás solo sexualmente por ser uno más del clan de los frustrados por que no has vivido una sexualidad plena en tu juventud, ¿eres de pajas y de película porno? ¿Sabes amar, sanar, dar, conquistar…? ¡Tíos eso no es saber, es mal quererte! Hoy está la peña desbocada, amargada ¡la mujer que dices amar hay que currarla más! Esa gente de veinte me dan pena, los de treinta risa ¡los demás ya burla! Cumplamos años con mérito, con dignidad, el que hoy está solo… muy tonto será y se cree muy grande… amigo.

A los cuarenta la soledad pesa y mucho, a los cincuenta aprende a ser antes de tener, ya que algún día te preguntarás ¡por qué de tantas me quedé sin nadie! Hay amigo, solo tu ego te pondrá responder ya que la mujer es el corazón y tú ¡solo la razón de su amor y decisión de tu simple ser!

Por S.R.

¿Hablamos de… MADRES y madres?

A menudo me pregunto dónde y quién enseña tal faena y lo más curioso es ¿Quién lo valora? Alguien me dice que para saber lo que es ser madre hay que saber ser hijo, curioso comentario. En estos tiempos que corren veo a madres e hijas como hermanas, madres que salen con amigos de sus hijos, hijos con parejas de su madre y escucho palabras como “mi hija es mi mejor amiga” o “mi madre es mi mejor amiga”. ¿Podemos o se debe ser realmente amiga de los hijos?

En estos tiempos que corren veo a madres e hijas como hermanas, madres que salen con amigos de sus hijos, hijos con parejas de su madre y escucho palabras como “mi hija es mi mejor amiga” o “mi madre es mi mejor amiga”. ¿Podemos o se debe ser realmente amiga de los hijos?

¿Quién establece luego esa responsabilidad? A mi entender, la madre es un motor de la vida de un hijo, de esos a los que nada ni nadie puede reparar. Cuando ese motor falla, un hijo se pierde porque se queda sin luz. ¿Sabremos valorar y respetar esa titulación de madre? He leído de un gran escritor portugués una frase donde decía que una madre es para cien hijos, pero cien hijos no son para una madre.

Siento ir en contra de muchas de esas madres que viven una segunda juventud yendo de pandilla con sus hijos, al igual que me repugna la falta de respeto y el egoísmo de un hijo mimado y malcriado; el que sólo busca solución quitando sueño a la que parió, y aún ya mayor, da más trabajo que esas noches en vela por un resfriado o lo que sea.

Los hijos, una madre que padece es persona y es mujer. Infeliz del hijo que por su egoísmo se cree que puede juzgar o condenar a una mujer que os ha parido. Los hijos se crían en casa, no en bares; se crían con amor, no con excusas ni falta de tiempos; los hijos buscan ejemplos, no historias. Hoy en día van más por la vista que por la oída.

Tu hijo no busca la mami más chuli, busca apoyo, amor y realismo. Mamis, dejar espacios que para “guais” ya están los amigos o los colegas, hay tiempo para todo, pero jamás habrá tiempo para olvidar a esas grandes madres.

La mayor herencia que una madre le puede dejar a un hijo es dignidad, respeto y buenos recuerdos.

Por S.R.