¿En tu cama o en la mía?

Cada vez hay más soledad entre familias, parejas y difíciles resultados en convivencia sexual. Damos hoy en día mucha más importancia al desahogo superficial que al amor, al respeto y a la unión familiar.

Este fin de verano, se han separado en mi entorno más de diez parejas entre amigos y conocidos. Me piden consejo y solo les respondo si realmente saben lo importante que es amar sin barreras, ni limitaciones; muchos ni me contestan como si les hablara en un idioma extraño.

Sexi, sexo, vício, sexo, más sexo, culos tetas, pollas, más tetas, más culos y vaginas… ¿No se da cuenta esa gente que eso lo puede tener cada día? Cuando quieras en porno, en prostitutas, en transexuales; es decir todo tipo de vício está servido.

Lo que realmente cuesta encontrar es amor, sí amor real, amor de ese cuando uno necesita apoyo, hablar, cuando estás enfermo, triste y agobiado. Ese amor te reconforta porque sientes que jamás estarás solo mientras alguien te puede escuchar, cuidar y mimar…

¿Te dará el mismo placer tu cama, o la mía? La mía sé quien duerme cada noche en ella, reconozco su olor, su sentir y sus valores. ¿Tú sabes dónde descansar? Amigo las mentiras solo son tus amarguras, las putas tus frustraciones y el vício una podrida ilusión.

Mi hijo mayor se ha casado y me preguntó: —Papá ¿cómo ser un buen marido? No he sido jamás un buen ejemplo, aprendí con fallos y por necio la vida me apaleó. ¿Qué padre puede contestar a tan grave pregunta? Yo sí, por mierda, por pecador, por ser más pene que esposo y padre.

Le contesté: —Hijo el secreto de una gran familia está en la ignorancia de nunca dejar de poner a tu esposa como tu prioridad. Si no eres capaz de hacerlo no te cases jamás, ya que hombre que no escucha, hombre que no valdrá nunca nada. Ese hombre con respuesta siempre afirmará: —En tu cama no, ya tengo la mía.

Por Saho

Empezar de cero;

Podemos ser capaces de separarnos, divorciarnos una, dos, incluso algunos inútiles ¡tres o más! También podemos ser infieles, falsos, poco verdaderos con la primera, segunda, tercera… Cuando tenemos la oportunidad de que alguien nos perdone y reconocer nuestros fallos, en vez de tapar nuestros errores, será genial empezar de cero.

Como hombre de más de 45, quiero deciros a todos que cada día es más fácil percibir la tentación que la tristeza de la soledad. Miramos tetas y culos ajenos pensando que la que los lleva sería la mujer perfecta, ¡ostras que buena está! ¿No?

Lo que no nos damos cuenta es que algún tío más listo que alguno de vosotros estará intentando ligar con vuestra mujer, mientras ustedes están entretenidos con niñas que jamás os darán lo que una gran mujer os estará dando. No nos equivoquemos más, valorar quien está en vuestra cama cada noche, besarla, mejorar la gratificación de su gratitud al perdonaros, al cuidaros, ¡al estar ahí siempre! Solo quien ama perdona.

Solo quien ama aguanta nuestros cambios de actitud, humor, pensamiento y muchas veces pasotismo. Somos cómodos y nos gusta no escuchar, solo estamos en su buena causa, nunca en lo malo. Huimos de la rutina buscando acción, y ¿no celebramos un día más en casa?

Os digo que empezar de cero es realmente una buena opción que os regala una nueva oportunidad. Cambiar es bueno, es posible y muy positivo. No dejéis de hablar, dadlo todo por tener una familia, dejad la hombría para la calle y ¡sed más humildes en casa!

No se arregla nada sin esfuerzo, jamás con fuerza bruta, gritos o falsas promesas. El que quiera saber algo más, estaré encantado de contestaros. Un saludo y creed en vuestras familias, recordad que menos que cero es nada, la soledad es muy cruel y esa no cobra. ¡Despertad!..

Por Saho

¡ El divorciado cobarde !

Hay hombres que temen las relaciones continuadas, que miden los tiempos, se celan de sus respuestas… ¡por ser cobardes! Esos hombres que llevan tatuajes en la frente de fracaso. ¿Sexo sí, seriedad no? ¡Cuidado! Cuidado con la dependencia materna que llevan de apellido casero, esos tipos de interés tramposo y falta de lealtad.

Esos que se llaman legales cuando solo por un susto los llevan a esconder su hombría en el manto de sus padres. Esos que hablan despellejando la vida de otros para esconder sus miedos, que se creen machos de mierda sin asumir ningún tipo de responsabilidad y menos su puta frustración de fracasados.

Esos que ni con edad se hacen maduros, que viven con la red de seguridad de su mamá. Vuelvo a decir y me repetiré, una mujer no es la mami del hijo de nadie. El que sirva para hablar y para llevarte a la cama hoy, que no sirva para que le cambies el pañal mañana.

Cuidado con este tipo de hombre divorciado, inmaduro, ocioso e inestable… te arruinan tu verdad, tu estabilidad porque solo venden egoísmo y penurias. ¡Cuida tu vida, mujer! Esa poca clase de hombre no tiene piedad en joder tu bienestar, no sabrá ser feliz jamás si tú no eres su mamá. Tú vales más que el puto pobre desesperado, divorciado.

Por Saho